Un argentino formará parte de la misión a Gaza que liderará Greta Thunberg
“Siento miedo, pero estoy preparado. Esta misión va más allá de mí: es algo para la humanidad”, dijo, en diálogo con LA NACION, Nicolás Marín, el explorador argentino de National Geograp...
“Siento miedo, pero estoy preparado. Esta misión va más allá de mí: es algo para la humanidad”, dijo, en diálogo con LA NACION, Nicolás Marín, el explorador argentino de National Geographic, que se reconoce como activista ambiental y humanitario. “Sin lugar a dudas, esto será mi experiencia más extrema”, indicó.
El fotógrafo formará parte del convoy de más de 50 embarcaciones que saldrán rumbo a Gaza desde España. Planean llegar a la zona de conflicto el 15 de septiembre. Decenas de activistas, médicos, psicólogos, comunicadores y expertos en derecho, de 44 nacionalidades, acompañarán a Greta Thunberg en la nueva acción, que tendrá una duración aproximada de 25 días. Al igual que todos ellos, Nicolás se prepara para el entrenamiento de cuatro días que recibirá en Barcelona. La misión espera atravesar el cerco marítimo para acercar alimentos, ayuda sanitaria y medicinas.
Marin adquirió popularidad por haber sido reconocido en 2023 como el mejor fotógrafo de naturaleza del mundo. El mismo año, fue destacado por documentar los efectos del cambio climático en el ártico para un programa de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), y fue elegido por dicho organismo como uno de los 100 jóvenes líderes. Actualmente, el joven de 25 años es embajador de Buena Voluntad de Naciones Unidas. Aunque viaja constantemente por su trabajo, vive en el barrio de Caballito de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Nació en San Miguel, provincia de Buenos Aires.
A su corta edad, Marín nunca antes se había desempeñado en contextos bélicos. Sin embargo, fue su vasta experiencia en navegación la que lo llevó a la misión humanitaria: las expediciones a las Islas Malvinas, con olas de 15 metros de altura, al Polo Norte y a los mares de Noruega y Finlandia lo preceden. Confiesa que cuando tenía 22 años, no se sintió preparado para viajar a Ucrania. Ahora, todo cambió.
“Para esta misión buscaban a alguien capaz de hacer un registro audiovisual, pero también a un tripulante experimentado”, señaló Marín. Y agregó: “No se parece a nada de lo que he hecho antes. Esto no será lo mismo que documentar tiburones. Sé que no va a haber descanso, que el camino no será fácil, pero hay algo que me motiva: solo cambian la historia los que se animan”, manifestó.
Ayudar a la poblaciónLos antecedentes no son alentadores. En el mes de junio, Greta Thunberg intentó llegar a Gaza con una misión de menor escala, pero fueron interceptados por las fuerzas israelíes. Esta vez, con decenas de embarcaciones, profesionales y un mayor número de tripulantes experimentados, ambiciona concretar el fin de acercar la ayuda a la población.
“No vamos con una mirada política, sino para asistir a los que padecen la guerra. Muchas personas mueren de hambre”, subrayó el fotógrafo. Demuestra tener un objetivo claro: “Quiero que mis ojos sirvan para enviar al mundo un mensaje de paz”. Sabe que les espera un contexto desafiante: “Hay muchos ataques. Las cifras no oficiales indican que han muerto más de 650 periodistas”, sostuvo.
La admiración que Marín siente por la activista sueca es una de las cuestiones que lo empuja a embarcarse: “Greta es mi máxima inspiración, por eso esta misión es especial para mí. Voy a poder compartir esto con ella”. El fotógrafo la sigue en su activismo desde que Thunberg empezó con el movimiento de Fridays For Future.
El fotógrafo reconoce sus temores: “El cara a cara con un soldado, el no entender su idioma debe ser algo aterrador. Desde un punto espiritual, el miedo a no volver por supuesto que está. Esto es, sin embargo, algo noble para el mundo”, expresó.
Para mitigar sus miedos llevará la estampita de la Virgen de Luján que su madre le dio, y los amuletos de su padre. “Como padres me dirían que no vaya. Saben, sin embargo, que tengo una misión en la vida”, señaló.