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Temblor ecuménico en la AFA, la casta de la casta

Los escándalos que acaban de explotar dentro de la AFA son tan espinosos e impredecibles que pocos sectores de la política y el fútbol pueden sentirse indemnes. Por eso cuesta tanto encontrarle ...

Temblor ecuménico en la AFA, la casta de la casta

Los escándalos que acaban de explotar dentro de la AFA son tan espinosos e impredecibles que pocos sectores de la política y el fútbol pueden sentirse indemnes. Por eso cuesta tanto encontrarle ...

Los escándalos que acaban de explotar dentro de la AFA son tan espinosos e impredecibles que pocos sectores de la política y el fútbol pueden sentirse indemnes. Por eso cuesta tanto encontrarle juez a la denuncia que la Coalición Cívica hizo hace una semana por presunto lavado en la compra de la casa de Villa Rosa que, según los papeles, está a nombre de dos monotributistas. La bomba no solo es transversal a los partidos, sino a la vida pública en general: hay que repasar los integrantes de los tribunales de Disciplina, Apelaciones y Ética de la entidad para entender que meterse con la AFA es tocar a la corporación judicial.

La presentación de Elisa Carrió y equipo coincide con otra del Gobierno que también involucra a la AFA y que incluye a bancos y a casas de cambio. Una cuestión de oportunidad: aunque el Banco Central y la UIF venían investigando el tema desde hacía un año y medio, el momento elegido por la Casa Rosada para llevarlo a la Justicia fue inmediatamente después del triunfo del 26 de octubre. Es obvio que hay otros vientos. “El fútbol perdió cuando Tapia apoyó a Sergio Massa”, concluyó esta semana Humberto Grondona en una entrevista con Diego Sehinkman en TN.

Hacia adentro de los clubes, el problema es lo que hasta ahora venía funcionando sin ruido. Lo saben los que, por distintos motivos, casi siempre el mismo, han tenido que recurrir en los últimos años a Sur Finanzas, una de las casas de cambio investigadas. Firmado el contrato, por lo general de sponsoreo, y después de un tiempo, el dirigente empieza a advertir que la empresa de Ariel Vallejo, que se presenta a sí mismo como “la billetera del fútbol”, no cumple con la puntualidad originaria. Y, en algún momento del mes, la comisión directiva cae entonces en la cuenta de que le faltan fondos y no podrá pagar todos los sueldos, su eterno desafío, y llama a Sur Finanzas. “Te dicen: ‘Está bien, vení a buscar algo’”, cuenta un dirigente. “Algo” no es todo: puede ser el 30% o, con suerte, el 50% de lo pactado por mes. El trámite que sigue es conocido: hay que pasar por esas oficinas y retirarlo en pesos y en una bolsa. “Algo”.

Cómo seguirá el fondeo de muchos clubes para los que las cuotas no alcanzan y el pago de derechos televisivos mensual de la AFA no representa más que el 10% es uno de los misterios de 2026. Pero no el único: el principal reside en cómo afectará esta crisis a todo el establishment. La incógnita incluye al Gobierno, que ha decidido no confrontar directamente con Tapia –con la excepción de Patricia Bullrich–, pero que saca provecho de lo que llama “capital simbólico”: Tapia es aliado de Kicillof y Massa y exactamente lo opuesto al rumbo que propone Milei.

Para el Presidente tampoco parece sencillo de manejar. En primer lugar por algo pasajero, el sorteo que se hizo ayer en Washington para el Mundial y que desatendió pese a la invitación de Trump al palco. Las opiniones libertarias no coinciden. Milei ha dicho en privado que su faltazo no precipitó la cancelación del viaje de Scott Bessent a la Argentina y que quienes lo afirman “están operando”, pero esa versión tiene detractores. Al menos hasta el miércoles, en el Ministerio de Economía y otras partes del Gobierno temían que la ausencia tuviera un impacto negativo en la relación con Bessent. La Argentina está en plena conversación del acuerdo por los aranceles y en la negociación bilateral cuenta todo, hasta la sugerencia de acumular más reservas en el Banco Central. “Ellos no saben quién es el Chiqui Tapia y esto puede haber generado ruido”, dijo un libertario influyente. Pero esa inquietud se fue apagando en la medida en que la crisis de la AFA ganaba relieve y empezaba la euforia por el regreso de la Argentina al mercado de deuda. En el J. P. Morgan, por ejemplo, admiten que la famosa compra de bonos por 20.000 millones de dólares de la que se llegó a hablar en la campaña –y que el Palacio de Hacienda niega–ya no hace falta, al menos en esa dimensión.

La duda más gravosa de la investigación es por ahora hasta dónde puede avanzar. ¿Habrá arrepentidos? Todo puede pasar en un universo que se manejó siempre con volúmenes importantes de efectivo y en negro. ¿Es cierto que hay movimientos cambiarios autorizados a la AFA en pleno cepo? ¿De dónde salieron esos montos siderales que claramente exceden lo que se recauda por publicidad o entradas? ¿Del juego clandestino? ¿Hasta dónde las filtraciones podrían involucrar financiamiento de campañas no solo de la oposición, sino también del Gobierno? ¿Ya está Estados Unidos, como se supone, pendiente de cinco cuentas bancarias?

Son años de silencio. Un hermetismo también deliberado: los clubes saben que deben hacer buena letra para todo, incluso para golpear ventanillas como la de Sur Finanzas. No quejarse por ejemplo, en ningún caso, de un mal arbitraje. Puede pasar que, después de un partido controvertido, y siempre y cuando no existan declaraciones públicas que conspiren contra la conducción nacional, alguien de la AFA tenga la deferencia de llamar para agradecer el gesto. Que se haya preservado “a la familia”. Es el concepto que usan.

En la AFA han decidido defenderse. De un adversario que no terminan de definir: puede ser el Gobierno, Macri o cualquiera que proponga abrir una posibilidad a las sociedades anónimas deportivas, incluidos medios de comunicación a los que acusan de querer participar del negocio. Habrá sin dudas un abroquelamiento en derredor de Tapia. La semana pasada, los Premios Alumni entregaron por primera vez en 25 años una distinción, el Alumni de Platino, y se lo dieron a él. Repasar esa ceremonia permite entender el modo en que el sanjuanino ejerce la autoridad. El momento final en que, por ejemplo, una figura como Luis Islas, campeón del mundo del 86 y titular en el Mundial del 94, hacía fila entre múltiples desconocidos solo para saludar al Chiqui. O la hipérbole de Marcelo Achille, presidente de Defensores de Belgrano, sobre el escenario: “Somos el orgullo del pueblo argentino. La gente salió a la calle como nunca cuando le dio el Mundial; y se lo dio Tapia, porque no lo bancaban a Scaloni, no lo bancaban a Messi, no lo bancaban al Fideo. Vienen por todos nosotros”.

La Inspección General de Justicia le dio a la AFA 20 días hábiles para contestar notificaciones que ha desoído sobre los balances de entre 2017 y 2023. Estas fricciones incomodan incluso a referentes de la oposición aliados de Tapia o Pablo Toviggino. Al gobernador Gerardo Zamora, por ejemplo, de cercanos vínculos con el tesorero, pero últimamente crítico de la desprolijidad con que, dice, se maneja. El santiagueño ya venía molesto con que en el PJ lo estuvieran señalando como el preferido de Cristina Kirchner para 2027, una movida que atribuye a la expresidenta.

El resultado de octubre y la condena influyen.

En Santiago del Estero le aconsejan ahora bajar el perfil. Hay quienes llegaron a lamentar su participación en la foto de los personajes del año para la revista Gente, que lo invitó como uno de los triunfadores de octubre. Pero Zamora fue y aprovechó para saludar amablemente a otros dos convocados, Patricia Bullrich y Diego Santilli.

Tiempo para ser prudente. Si la Justicia avanza, lo que viene puede resultar explosivo para todos. Tampoco hay que olvidar que Tapia llegó a la AFA como salida luego de la crisis del empate en 38 votos, y sobre la base de un acuerdo entre el gobierno de Macri y Hugo Moyano. “Pasaron tres presidentes y me quedan muchos años más”, advirtió el exyerno del camionero, Alumni de Platino en mano. El fútbol tiene mandatos que trascienden incluso el poder sindical. Es la casta de la casta.

Fuente: https://www.lanacion.com.ar/opinion/temblor-ecumenico-en-la-afa-la-casta-de-la-casta-nid06122025/

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