Salud: el Gobierno creó una comisión nacional asesora en bioética para abordar desafíos emergentes
Entre las normas que el Gobierno apura en los últimos días del año, se disolvió la comisión que en los últimos 27 años debía entender y asesorar a las autoridades sanitarias en asuntos, dil...
Entre las normas que el Gobierno apura en los últimos días del año, se disolvió la comisión que en los últimos 27 años debía entender y asesorar a las autoridades sanitarias en asuntos, dilemas o conflictos relacionados con la práctica médica, la investigación clínica y la incorporación de nuevas tecnologías o técnicas. En su lugar, el Poder Ejecutivo creó la Comisión Nacional de Bioética, que funcionará –como su antecesora– dentro del Ministerio de Salud de la Nación.
En esa cartera afirman que con este cambio buscan “ordenar” tareas y obligaciones frente a la “fragmentación, superposición de funciones y competencias poco definidas” que hasta ahora tenía la Comisión Nacional de Ética Biomédica, creada en 1998.
Le siguieron la Comisión de Investigaciones Clínicas Aplicadas en Seres Humanos, el Comité Nacional Asesor de Ética en Investigación y, a mediados de 2020, un Comité de Ética y Derechos Humanos en Pandemia de Covid-19 (Cedhcovid19) aun cuando ya existía la comisión nacional que podía entender en ese asunto. En febrero de 2021, ante el escándalo del circuito de vacunación VIP, ese comité especial rechazó públicamente el acceso privilegiado a dosis que debían asignarse, por orden, a grupos prioritarios. A los pocos días, sin embargo, avaló en el Consejo Federal de Salud (Cofesa) modificar la definición de “personal estratégico”, propuesta con la que el gobierno de Alberto Fernández buscaba reducir la lista de vacunados VIP antes de darla a conocer, como informó LA NACION en ese momento.
Ahora, el Decreto N° 893 publicado en el Boletín Oficial la semana pasada derogó la norma anterior y dispuso crear la Comisión Nacional de Bioética con seis miembros titulares, más tres suplentes, que durarán cuatro años en el cargo. La selección “por antecedentes e idoneidad” dependerá de la presidencia de la comisión, lugar que retuvo el ministro de Salud de la Nación, Mario Lugones.
“La creación de un organismo único y consolidado, con competencias definidas y legitimidad institucional, favorece el cumplimiento de los principios éticos internacionales en investigación en salud, al tiempo que brinda mayor transparencia”, fundamentó la norma publicada. “El progreso científico y tecnológico en las ciencias biológicas y médicas ha generado nuevos desafíos éticos, legales y sociales en el ejercicio profesional de la salud, que requieren respuestas actualizadas por parte del Estado nacional”, planteó el texto.
En el decreto, al justificar la disolución de la comisión anterior, señaló el Gobierno que ese cuerpo “no ha funcionado de manera efectiva ni ha cumplido con los objetivos planteados, evidenciando la necesidad de reformas estructurales y normativas para abordar los desafíos actuales que exige la bioética”.
Como su antecesora, tendrá que asesorar en consultas que lleguen al Ministerio de Salud provenientes de los tres poderes del Estado y organismos oficiales sobre temas que requieran su opinión (investigación clínica, calidad de la atención, humanización de la medicina, equidad y solidaridad de los sistemas de salud, avances científicos e incorporación de nuevas tecnologías, entre otros), como así también acreditar mediante un nuevo Consejo Federal Asesor de Ética en la Investigación –creado por el mismo decreto– a los comités de ética que funcionan en las instituciones nacionales en las que se hacen ensayos clínicos, además de seguir trabajando con las comisiones o comités pares de las jurisdicciones.
Una vez conformada, sus miembros tendrán que tener al menos dos reuniones anuales. Trabajarán ad honorem y sus documentos e informes serán públicos. Entre sus funciones se contempla la de “recibir consultas y emitir recomendaciones sobre los casos que planteen dilemas bioéticos, éticos en la atención de la salud, la investigación biomédica o la incorporación de nuevas tecnologías”.
El Consejo Federal Asesor de Ética en la Investigación, en tanto, va a estar integrado por un miembro de los comités provinciales.
“La nueva comisión nacional será el único organismo rector en materia de bioética a nivel nacional, lo que permitirá ordenar el actual escenario de actores intervinientes caracterizado por su fragmentación, superposición de funciones y competencias poco definidas”, dijeron desde Salud sobre los alcances del decreto. “Para eso, dispone la derogación de la Comisión Nacional de Ética Biomédica, creada en 1998, pero que nunca estuvo plenamente operativa, y disuelve el Comité de Ética en Investigación y el Comité Nacional Asesor de Ética en Investigación que estaban bajo la órbita del Ministerio de Salud. Sus funciones van a ser absorbidas por la nueva comisión”, agregaron por escrito.
Sobre los requisitos fijados para los integrantes aclararon que los seis titulares y los tres suplentes “deberán ser especialistas en ética, expertos en salud, representantes de la comunidad y profesionales de disciplinas como Derecho, Filosofía, Antropología o Economía”, entre otras que intervienen en las deliberaciones bioéticas.
A la vez, sus integrantes van a poder convocar, si así lo deciden, a las sociedades científicas y asociaciones profesionales, instituciones académicas, prestadores de servicios de salud o referentes en distintas especialidades para abordar consultas o asuntos específicos que vayan a surgir. “Permitirá anticipar respuestas frente a nuevas tecnologías, innovaciones en salud y debates emergentes”, afirmaron en la cartera sanitaria.
Otro cambio en asesoramiento en vacunaciónLa creación de esta nueva comisión fue previa a la publicación el lunes pasado de la Resolución N° 3344 en el Boletín Oficial a través de la que el Ministerio de Salud derogó también normas previas para reorganizar el funcionamiento y la conformación de la Comisión Nacional de Inmunizaciones (Conain).
“El nuevo reglamento reafirma el carácter estrictamente consultivo y no vinculante de la Conain, al establecer de forma explícita que la autoridad técnica y decisoria en materia de políticas de inmunización corresponde a la cartera sanitaria nacional”, explicaron en Salud.
Como con la Comisión Nacional de Bioética, la presidencia de la Conain también la retuvo el ministerio a través del titular de la Dirección de Control de Enfermedades Inmunoprevenibles (Dicei) o de la Dirección Nacional de Control de Enfermedades Transmisibles. Hasta ahora, rotaban en ese cargo sus miembros.
“La normativa anterior asignaba a la Conain un rol de asesoramiento general sin mayor detalle de sus funciones. Para revertir esa situación, la actualización establece que la comisión será responsable de emitir recomendaciones científicas vinculadas a la introducción, modificación o retiro de vacunas del calendario nacional, asesorar sobre esquemas de inmunización y aspectos técnicos de la administración de vacunas y aportar evidencia para el análisis epidemiológico ante situaciones sanitarias específicas o brotes”, explicaron desde el Ministerio de Salud.
Agregaron que la agenda de trabajo que definirá la Dicei incluirá la evaluación de “evidencia científica emergente sobre nuevas vacunas, plataformas o estrategias de inmunización con potencial impacto en las decisiones nacionales”.