Romy Mars: la heredera del clan Coppola que saltó a la fama por una costosa travesura y un video viral
A Romy Mars el título de nepo baby no le pesa. Tampoco el linaje materno ni el esfuerzo del clan Coppola por mantener sus vidas privadas lejos del ojo público. Hace dos años rompió las r...
A Romy Mars el título de nepo baby no le pesa. Tampoco el linaje materno ni el esfuerzo del clan Coppola por mantener sus vidas privadas lejos del ojo público.
Hace dos años rompió las reglas de la familia y en medio de un castigo por haber usado la tarjeta de crédito de su papá para alquilar un helicóptero privado tomó su teléfono celular y publicó un video en Tik Tok, algo prohibido hasta entonces. El descargo se volvió viral y le sirvió para darse cuenta de que ser hija de Sofía Coppola y Thomas Mars -líder de la banda Phoenix- y la nieta de Francis Ford Coppola no era algo que debía tomarse con solemnidad, sino todo lo contrario. “Crecí en sets de rodaje y viendo cómo mi padre surfeaba sobre una multitud en sus conciertos. Realmente no es mi culpa si tengo actitud”, se excusó tiempo después por la misma vía.
Hoy, Romy tiene 18 años y su imagen se replica tanto en los lugares reservados para las celebrities más exclusivas -hace poco se mostró junto a su madre y a Cosima, su hermana menor, en el desfile de Chanel durante la Semana de la Moda en París- como en sus redes sociales, donde se dio el gusto de volver a ser viral gracias a un divertido baile junto a Jacob Elordi que superó las 34 millones de reproducciones. Pero hay más: cuando no pasa el rato con figuras como Kirsten Dunst, Adam Driver o Lana del Rey, le dedica toda su energía a la música: sueña con una carrera con sello propio. Porque, como el resto de los herederos de Hollywood, ella también quiere ser parte de la industria, aunque haya elegido hacerlo con desfachatez, algo de curiosidad y nada de culpa.
Una infancia entre reflectoresRomy Croquet Mars Coppola nació el 28 de noviembre de 2006 en París, en el seno de una de las familias más influyentes del cine y la música contemporánea. Su madre, Sofia Coppola, venía de consagrarse con Perdidos en Tokio (2003), y su padre, Thomas Mars, era el vocalista de la exitosa banda francesa de indie rock Phoenix. Romy, la primogénita de la pareja, llegó al mundo en medio de giras, rodajes y premios y fue bautizada en homenaje a su tío Roman, hermano mayor de Sofia y uno de sus colaboradores habituales en sus películas.
Poco tiempo antes de su llegada al mundo, Sofia confesó que no tenía aún un nombre para la bebé. “Vamos a esperar y ver”, dijo. “Cuando estás escribiendo, elegís nombres para los personajes, pero es más difícil en la vida real”, admitió.
En 2010, la familia se trasladó de París a Nueva York. Ese mismo año nació Cosima, la segunda hija del matrimonio. A pesar del peso de los apellidos, los Mars-Coppola intentaron mantener una vida doméstica tranquila en la zona del West Village. El objetivo de Sofia era preservar a sus hijas del ruido mediático que rodea a los Coppola desde hace décadas. “No quiero que nunca se cansen”, dijo la cineasta en 2017 en una entrevista con The Guardian. “Nunca vi el sentido de llevar a los niños pequeños a los estrenos de películas y esas cosas. Solo quiero que tengan una infancia”, agregó. Eso sí, durante su infancia, que sucedió entre París, Nueva York y Los Ángeles, Romy pasó mucho tiempo rodeada de artistas en un estudio de música o en un set de filmación.
La primera aparición pública de Mars fue como modelo: en 2020 Marc Jacobs la convocó para posar en la campaña de Heaven, su línea juvenil. En las fotos que llegaron al público, la preadolescente de 13 años aparecía con una estética retro y una actitud tímida. “Te conocí poco después de que nacieras. Es un hermoso viaje verte crecer”, le escribió el reconocido diseñador y amigo de la familia a Mars en su cuenta de Instagram. Hasta ese momento, no existían cuentas oficiales ni apariciones públicas regulares de Mars, algo que cambió con aquel famoso video de TikTok.
El video que la volvió viralEn marzo de 2023, Romy, de 16 años, rompió el pacto familiar. Aislada en casa por un castigo —había intentado usar la tarjeta de crédito de su padre para alquilar un helicóptero privado y visitar a una amiga en Maryland—, decidió grabar un tutorial de pasta con salsa de vodka y subirlo a TikTok. Lo que siguió fue un gag de humor involuntario mezclado con la actitud de una niña que se sabe con privilegios: “No conozco la diferencia entre un ajo y una cebolla, así que tuve que buscar fotos en Google”, explicó, entre risas, mientras intentaba hacer algo en la cocina.
Lo que siguió fue la frase que quedó en el recuerdo de su ingreso al mundo de la fama. “También pensé en hacer esto ya que estoy castigada, porque la regla más importante de mis padres es que no tengo permitido tener ninguna cuenta en ninguna red social”, sumó y apareció con un Grammy entre las manos. “Ellos no quieren que sea otra nepo baby, pero TikTok no me va a hacer famosa, así que no importa”, completó.
Si bien el video fue eliminado, otras cuentas se encargaron de que el contenido se hiciera viral, mientras los medios la convirtieron en el símbolo de una generación que se ríe de sus privilegios. “Se convirtió en la nepo baby perfectamente consciente de que lo era”, escribió Vanity Fair España. También el New York Times tomó su caso para hablar de los herederos de las estrellas. “Mis compañeros pensaron que era una tontería”, confesó en una entrevista que le concedió a la revista W. “Entonces mi teléfono sonó ding-ding-ding-ding. ¡Fue una locura! No pensé que iba a explotar”, recordó.
Unos meses después de aquel video, durante una entrevista con The Hollywood Reporter, Sofia Coppola reveló su reacción ante aquel incidente. “Nos criaron para ser muy privados y las redes sociales son lo opuesto a cómo crecí”, aseguró. De inmediato, intentó encontrar una razón a la actitud de su primogénita. “Fue la mejor manera de que ella fuera rebelde”.
Sofia también hizo alusión a las repercusiones por la actuación de Romy. “Recibí muchos elogios por su cine. Y por su comedia. Ella es divertida. Pero la gente que habla públicamente de mi crianza no es lo que hubiera esperado”, agregó Coppola. Aquella travesura sin sentido terminó siendo, para Mars, su mejor carta de presentación.
De Cannes a la músicaLejos de esconderse tras el episodio, Romy comenzó a construir su identidad pública. En mayo de 2024 apareció junto a su abuelo Francis Ford Coppola en el estreno de Megalopolis, en el Festival de Cannes. Llevaba un vestido Chanel y una serenidad algo ajena a su edad. En la película tuvo un breve papel como reportera, lo que marcó su debut como actriz. Ese mismo año incursionó en la televisión con una participación en la serie English Teacher, de FX, donde interpretó a una estudiante. Pero la actuación fue apenas una escala: su verdadera vocación es la música.
Mars tenía 12 años cuando empezó a escribir sus canciones y a grabar melodías caseras. En mayo de 2024 lanzó su primer EP, con los sencillos “Stuck Up” y “From a Distance”. El material sorprendió por su madurez. Romy canta sobre el amor, la alienación y la vida entre flashes. En “From a Distance”, por ejemplo, repite: “Solo me veo real desde lejos”, una línea que podría resumir su relación con la fama. Teen Vogue la describió como “una voz nueva que suena familiar”. “El indie pop tiene una nueva estrella emergente, y se viste de Chanel”, publicó por su parte Vanity Fair.
“A-Lister”: humor, ironía y herencia visualEn mayo de 2025 estrenó “A-Lister”, y fue la mismísima Sofia Coppola la encargada de dirigir el videoclip. En la secuencia de imágenes, Romy interpreta a una joven que vive rodeada entre lujos, fotógrafos y poses vacías.“Podría alcanzar las estrellas, pero una vez que las tengo quiero más / concédeme todo lo que quiero y un día me aburriré de todo lo que tengo” canta, sin pestañear, en un guiño irónico a la fama heredada. El video —entre el glamour de Chanel y el sello indiscutible de su mamá— funciona como una sátira sobre lo absurdo del estrellato.
Dentro de las repercusiones que generó su trabajo, Vulture destacó su desparpajo y su capacidad para reírse de su entorno. “Ella es una estrella pop porque puede serlo. No ha tenido que escalar peldaños ni abrirse paso a codazos; ¿y por qué lo haría? Pedir perdón por ello está pasado de moda”, escribió Fran Hoepfner en un artículo titulado “Romy Mars es la nepo baby que necesitamos”.
Entre la música, la moda y el linajeAl mismo tiempo que consolidaba su perfil artístico, la figura de Romy empezó a aparecer en el circuito de la moda. En julio de 2025 asistió al desfile de Chanel Haute Couture junto a su madre y su hermana menor. “Me sentí tan especial, fue un sueño”, declaró a Vogue. La maison francesa la considera una de sus jóvenes musas, heredera natural del estilo etéreo y sobrio que caracteriza a Sofia. Mars también comenzó a trabajar en sus nuevas canciones junto a productores de la escena alternativa neoyorquina. Aunque todavía no anunció fechas, sus seguidores esperan un álbum completo para 2026.
Hoy, con apenas 18 años, Romy Mars encarna una figura singular dentro del clan Coppola: la de una artista que crece a la vista de todos, pero sin solemnidad. Su humor, su estética y su ironía la diferencian de otras herederas del Hollywood clásico. No se esfuerza por ser lo que no es ni rinde pleitesía: transcurre de una forma más ligera dentro de un universo que conoce como nadie y del que no reniega. Incluso decidió ser la primera de su familia continuar con sus estudios más allá de la escuela secundaria. “Nadie en mi familia ha ido a la universidad, pero uno de mis ingenieros de sonido dijo que sería bueno para mí tener una base sólida”, contó en Tik Tok.
En cada paso que Romy da se puede ver una mezcla de herencia y curiosidad. Así como cada integrante de su familia, ella busca su propio estilo aunque sin perder el sentido del juego. “A veces siento que todos esperan que sepa exactamente quién soy o qué quiero hacer solo por venir de donde vengo. Pero sigo averiguando, igual que cualquier chica de mi edad”.