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Regina: un juego entre el teatro y la ópera que amerita más potencia

Libro y dirección: Carlos Iaquinta. Intérpretes: Rita Terranova, Cali Mallo, Loly Sánchez, María Luján Mirabelli, Leonardo Estévez, Alberto Jáuregui Lorda, Verónica Díaz Benavente, Adriana...

Regina: un juego entre el teatro y la ópera que amerita más potencia

Libro y dirección: Carlos Iaquinta. Intérpretes: Rita Terranova, Cali Mallo, Loly Sánchez, María Luján Mirabelli, Leonardo Estévez, Alberto Jáuregui Lorda, Verónica Díaz Benavente, Adriana...

Libro y dirección: Carlos Iaquinta. Intérpretes: Rita Terranova, Cali Mallo, Loly Sánchez, María Luján Mirabelli, Leonardo Estévez, Alberto Jáuregui Lorda, Verónica Díaz Benavente, Adriana Poch, Martín Lira. Vestuario: Fernando Ferrigno. Iluminación: Oscar Bonardi. Música: Fernando Albinarrete. Piano y dirección musical: Susana Frangi. Sala: El tinglado, Mario Bravo 948. Funciones: domingos a las 20. Duración: 75 minutos. Nuestra opinión: regular.

Catalogada como una soprano ligera, Regina Pacini de Alvear, nacida en Lisboa en 1871, murió en Buenos Aires en 1965, a la edad de 94 años. Su historia personal está plagada de momentos tan difíciles como esplendorosos. De niña vivió en el seno de una familia humilde. Siempre fue una apasionada por el canto lírico. Su padre había sido un tenor de pocas cualidades que falleció siendo ella muy joven. El apoyo de un excelente maestro de la época y su esfuerzo por imponerse ante muchos contratiempos hicieron que, a los 17 años, debutara en el Teatro San Carlos de su ciudad natal y a partir de entonces se consagrara como una figura internacional sumamente prestigiosa.

Durante una gira por Latinoamérica comenzó a relacionarse, en Buenos Aires, con Marcelo Torcuato de Alvear, quien a poco de conocerla decidió que ella era la mujer de su vida. La joven demoró el matrimonio seis años. Siguió desarrollando su exitosa carrera en las salas operísticas más importantes del mundo, hasta que finalmente formalizó su casamiento y se instaló en la Argentina, junto con su esposo.

Su inserción en el medio aristócrata local no fue sencilla. Sufrió un fuerte rechazo por pertenecer al ambiente teatral, actividad que estaba muy denostada a principios del siglo XX. Pero, su gran amor por Alvear y su tenacidad la llevaron a promover una tarea cultural muy importante, como la transmisión de las óperas que se presentaban en el Teatro Colón a través de radio municipal o la creación de la Casa del Teatro, institución que hasta hoy se mantiene activa, entre otras.

Historia lineal

Regina, el espectáculo creado por el autor y director Carlos Iaquinta, presenta la historia de esta mujer de manera muy lineal, siguiendo los acontecimientos de su existencia progresivamente.

En escena se muestra a la exdiva, interpretada por Rita Terranova, en el día en que celebra sus 80 años. Solo su sobrino, Adams Benítez de Alvear (Cali Mallo), la visita y es él quien la va conduciendo a recordar fragmentos de su desarrollo personal, desde aquella infancia acompañada por su madre (quien luego se transformó en su representante artística), pasando por sus épocas exitosas como cantante, hasta ese presente en el que el personaje demuestra mantener aún una entereza notable.

La acción se desarrolla en dos planos. En el extremo izquierdo del escenario dialogan Regina y Adams, mientras que, a la derecha, un grupo de cantantes/actores irán recreando la historia de la protagonista entre pequeños diálogos y canciones en las que se narrarán acontecimientos vividos por la soprano. Lamentablemente todas las composiciones musicales son meramente descriptivas.

Este juego entre el teatro y la ópera que propone Iaquinta no logra la potencia necesaria que lleve a exaltar con cierta poesía el devenir de esta mujer que, sin duda, posee una historia muy rica e inquietante.

La experiencia expone un tratamiento muy poco sensible acerca de cierta orfandad que Regina padeció de pequeña, su trascendente ingreso al mundo del espectáculo, la intensidad de su amor por un hombre que la colmó de felicidad aunque también, él en muchos momentos, privilegió su estatus personal y la política en desmedro de la construcción de una alianza matrimonial más firme.

La actriz Rita Terranova posee sobrados recursos para asumir el rol de esta figura tan peculiar y pone de forma integral su capacidad interpretativa al servicio de este espectáculo, aportándole a esa criatura una cuota de intensidad y también aplomo con los que Regina parece haberse sostenido, más allá de las dificultades que debió atravesar, sobre todo en nuestro país. Pero, en definitiva, desde la dramaturgia, su personaje posee muy pocas posibilidades de crecimiento.

El resto del elenco juega sus escenas con cierta corrección, pero falta que cada uno de ellos exponga un compromiso mayor con esos personajes tan disímiles que se fueron cruzando a la largo del camino de esta señora que, no casualmente, ella los rememora presentándolos, en su mayoría, con características nada envidiables.

Fuente: https://www.lanacion.com.ar/espectaculos/teatro/regina-un-juego-entre-el-teatro-y-la-opera-que-amerita-mas-potencia-nid13092025/

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