Mariano Troilo: el zaguero gigante citado por Scaloni, que tiene como ídolo a Cuti Romero
“Todos jugaban, menos yo”. A veces, el fútbol suele ser cruel. Sobre todo, cuando la adolescencia golpea en las fibras íntimas y el mundo se llena de preguntas. Aquel pibe envuelto en sueños...
“Todos jugaban, menos yo”. A veces, el fútbol suele ser cruel. Sobre todo, cuando la adolescencia golpea en las fibras íntimas y el mundo se llena de preguntas. Aquel pibe envuelto en sueños de pelota estuvo a punto de abandonarlo todo. Colgar los botines antes de empezar a atarse los cordones. Sin embargo, algunas veces (tantas veces), la perseverancia, el talento y el esfuerzo tienen su recompensa. El pequeño gigante hoy es un hombre de selección.
No de cualquier selección: es uno más, entre los campeones del mundo.
Mariano Emir Troilo resulta su presentación en el DNI. Pirata cordobés, de Belgrano, de 21 años y 1,94m, zaguero tiempista y con el cuchillo entre los dientes, no lo tenía (casi, casi) nadie en carpeta, con una extraordinaria excepción: Lionel Scaloni, el seleccionador que todo lo ve. Nano es uno de los convocados de la selección, al igual que Kevin Lomónaco, el colosal central de Independiente, en el marco de un torneo Apertura con varios fuera de serie en ese rubro.
Pero la historia principal es la del joven que tiene el mismo apellido que aquel brillante director de orquesta argentino. Hizo las infantiles en la escuela de fútbol EFUL, un clásico establecimiento de Córdoba. En 2010 pasó a Belgrano, aunque empezó a entrenarse con una categoría mayor.
Cuando jugaba en la reserva celeste, contó parte de su breve, intensa historia. “Toda mi vida acá... Tuve muchos momentos buenos como malos. Muchas veces no jugué. Arranqué a jugar recién en la quinta de AFA. Los cuatro años atrás, no iba ni al banco. El esfuerzo, al final, tiene su recompensa”, contaba, luego de algunos chaparrones.
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Fue una etapa durísima, como si el sol no saliera jamás. Primero, quiso escapar del Pirata cordobés. Tuvo exámenes en Defensa y Justicia y Lanús. Quedó, pero no estaba seguro. Y su papá lo convenció no solo de quedarse en Belgrano: le dio la mano, una palmada en la espalda, con la convicción de que no debía bajar la guardia. Que era ese lugar, esa camiseta.
“Ya no quería saber más nada del fútbol en ese entonces. Le rogaba a mi viejo que no me mandara más, porque no la pasaba bien. Todos jugaban, pero yo no. Él fue el que me aguantó, con mi vieja y mis abuelos. Fueron un gran sostén en mi vida”, contó en una entrevista.
#SelecciónMayor Se viene una nueva doble fecha de Eliminatorias ante 🇨🇱 y 🇨🇴 y nosotros lo vivimos así 😍 pic.twitter.com/ulE0cX6g1g
— 🇦🇷 Selección Argentina ⭐⭐⭐ (@Argentina) June 2, 2025“Tengo como referencia al Cuti Romero, me reflejo en él. Mi sueño es llegar a la selección y salir campeón del mundo como él”, contó, un año y medio atrás. Y llegó, al predio de Ezeiza, una fría tarde de otoño.
Debutó en Primera en 2023 y acumula 51 partidos y dos goles en el Pirata, uno de ellos ante Aldosivi en el Apertura de este año, en el que el conjunto cordobés no avanzó a los playoffs. Sin embargo, se destacó. Sin participaciones en las selecciones juveniles, el defensor tiene como punto fuerte su cabezazo, vía por la que le marcó al Tiburón. Es una opción de relevo con la mira en el futuro, considerando que Nicolás Otamendi tiene 37 años y, además, debe cumplir una fecha de suspensión y no estará disponible frente a Chile.
Además de Troilo, tendrán su estreno en la selección mayor Franco Mastantuono y Lomónaco. Con 17 años, el volante de River es uno de los mejores jugadores del fútbol argentino y está cerca de ser vendido a PSG por 45 millones de euros.
#Belgrano
Mariano Troilo marca el 2° gol del Pirata y amplia la diferencia ante #Aldosivi. pic.twitter.com/x0K5Y2gBE7
El defensor, en cambio, se formó como número 5 y sus primeros entrenadores quedaron sorprendidos por su técnica. Es la figura del Apertura que acaba de consagrar a Platense, mientras Julio Vaccari, el entrenador del Rojo, cita frases como ésta, casi a diario: “Si me venden a Lomónaco, me largo a llorar”.
Mientras tanto, el capitán de la selección, Lionel Messi, llegó este lunes a Buenos Aires para sumarse al plantel que bajo las órdenes de Lionel Scaloni jugará ante Chile y Colombia por la eliminatorias sudamericanas.
La albiceleste, campeona del mundo en Qatar 2022, ya está clasificada para el Mundial de 2026 en Canadá, Estados Unidos y México. “Ya estamos”, publicó Messi en Instagram al llegar a la capital argentina, antes de sumarse al resto del equipo en el entrenamiento en la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), en Ezeiza.
#SelecciónMayor ¡Buenos días, capitán! 👋🏻 pic.twitter.com/GnOYJ88OXP
— 🇦🇷 Selección Argentina ⭐⭐⭐ (@Argentina) June 2, 2025La Argentina visitará a Chile el próximo jueves 5 de junio y recibirá el martes 10 a Colombia, en el Monumental. En ambos casos, habrá un rostro desconocido y absolutamente feliz.
¿Tendrá un puñado de minutos en la doble jornada? El cordobés debutó en Belgrano el 3 de agosto de 2023, en el triunfo por 1 a 0 sobre Claypole, por los 16avos de final de la Copa Argentina. Como Cuti, debe cuidarse de los excesos: fue amonestado en 14 partidos.
Su joven jerarquía tiene relación directa con el campeonato que acaba de finalizar. El torneo de los zagueros: brillaron unos cuantos, no solo el pequeño gigante y Lomónaco. En la nómina se deben sumar Nacho Vázquez, el capitán de Platense, una fiera con voz de mando y Fabio Pereyra, de Huracán, el subcampeón, una suerte de mariscal. Y hay más.
Valentín Gómez entró en un bajón por todas las idas y venidas por el pase frustrado desde fin de año, pero es otro de los centrales muy buenos del fútbol argentino, todavía en Vélez. Mateo Pellegrino, el ladero de Pereyra, tiene altura y combate cuerpo a cuerpo y como en otras temporadas, Jhohan Romaña siempre brilla, en un San Lorenzo descolorido.
No hay que olvidarse de Santiago Sosa, de Racing, en la doble función de cinco y líbero. Y hasta se destacó Oscar Salomón, cuyo pase le pertenece a Boca, suerte de alternativa de Vázquez en el campeón.
Sobre todos ellos, Troilo. El pequeño gigante director de orquesta, la última invención de Scaloni.