Marcelo Gallardo se fue de Asunción más sereno y confiado, pero sincero con su River: “No generamos ese equipo confiable”
Marcelo Gallardo se sentó en la conferencia de prensa de la misma manera en la que lo viene haciendo desde algunos encuentros. Dejó atrás la furia maquillada que evidenció en Avellaneda el sáb...
Marcelo Gallardo se sentó en la conferencia de prensa de la misma manera en la que lo viene haciendo desde algunos encuentros. Dejó atrás la furia maquillada que evidenció en Avellaneda el sábado pasado y, si bien se entusiasma con lo que vio en Paraguay de su River durante el segundo tiempo de la igualdad sin goles ante Libertad, por la ida de los octavos de final de la Copa Libertadores, mantiene frases en las que se posa equilibradamente entre lo que resulta y lo que no. Algunos aspectos lo llevan a inflar el pecho y visualizar crecimientos, pero otros lo llevan a reflexionar y asegurar que las preocupaciones continúan.
Desde hace algunos encuentros se hicieron recurrentes las interrogaciones que se realizan en busca de una especie de balance por parte del entrenador riverplatense. Más allá de la innegable cantidad de soldados caídos en el último tiempo, la curiosidad periodística refiere a la sensación general acerca de un conjunto millonario que no parece propio de Gallardo si se compara con la tan exitosa primera etapa. El DT no compara, pero sí expone querer una forma que se acerque a tal y reconoce las insatisfacciones.
“Estamos en el proceso de formar el mejor equipo posible. No es una excusa: tenemos un gran plantel y algunos estaban en confianza, pero hoy no los tenemos. Entran jugadores y a algunos les cuesta más que a otros…“, inició su visión, que parece no modificarse aunque recupere a los futbolistas que siguen marginados: ”Teniendo a todos disponibles tratamos de funcionar de la mejor manera, pero todavía con algunos problemas de generar ese equipo confiable: ese que, desde el primer momento de los partidos, ya se pone en una postura diferente y lo mantiene. Eso nos falta todavía".
“Tenemos la obligación de ganar siempre, pero a veces no se pueden abrir los partidos, como hoy (por ayer). Tuvimos bajas importantes, pero más allá de eso no pudimos reconfirmar esa continuidad del inicio del torneo. La idea es recuperarlos y fluir desde el juego como sucedió hoy, que es lo que más me importa“, continuó su análisis acerca del estancamiento en el que percibe a River.
Aunque, a través de las respuestas, fue contrastando un tiempo del otro, marcando total inconformismo con el desempeño de la primera mitad y una cercanía a sus pretensiones mucho más notoria en el complemento: ”No nos gustó el primer tiempo: tenemos que alimentar lo hecho en el segundo la mayor cantidad de minutos posible. Hice sólo esas variantes (tres, todas en el descanso) porque el equipo estuvo bien con eso. Preferí no tocar más porque el equipo propuso lo que nos faltó en el primer tiempo. La búsqueda era buena, nos faltó el gol".
En sus conclusiones, además, le dio crédito a la labor de los paraguayos: “Que hayamos jugado mal en el primer tiempo también es producto de que Libertad se cerró y defendió muy bien. Nos bloqueó todo tipo de circuito y nosotros no estuvimos claros ni finos para jugar”. A la vez, profundizó sobre lo que les falta aceitar a sus dirigidos: “Tenemos que tratar de sortear esos momentos en los que no tenemos claridad. Con otra solvencia y mostrando una mentalidad diferente: cuando no podés jugar, te plantás de una manera donde tampoco sufrís. La búsqueda tiene que ser continua. Estoy confiado de que vamos a mejorar”.
Con respecto a la sequía de goles (llevan tres sin marcar) aseguró que “no nos va a generar un enfoque”, pero sí tomó esa referencia para transmitir sus malestares: “Arrancamos bien y después hubo un bachecito que me preocupó: el sábado en Independiente (0-0) y el primer tiempo de hoy. Con San Lorenzo (0-0), que está funcionando bien, fue más disputado”. También, su optimismo tras el segundo tiempo en Asunción: ”Recuperar la memoria del juego me produce más satisfacción, con esas conexiones encontraremos el gol".
Eso fue lo que se llevó Marcelo Gallardo de Paraguay, en medio de algunas reflexiones agrias: “Nos pone bien haber terminado con esa cara diferente. La serie está abierta“, concluyó.
También tuvo un párrafo aparte para la situación de Maximiliano Salas, el hombre del mercado de pases, que tuvo un estreno auspicioso pero que enseguida se truncó por una lesión. Acerca de si podrá contar con él para el desquite, Gallardo explicó: “Salas estuvo trabajando bien estos días. Posiblemente de acá al domingo haremos una evaluación de cómo se va sintiendo. Hasta ahora era favorable su evolución, y tenemos la semana que viene para que termine de sanar y se sienta con confianza y seguridad, para ver si lo podemos tener para la revancha. Vamos a ver día tras día cómo se va sintiendo”.