Inés Weinberg: “A la Justicia nacional le cuesta aceptar nuestra competencia”
Con chicanas a la Justicia nacional y vocación por concretar de manera definitiva el traspaso de la justicia a la Ciudad de Buenos Aires, el Tribunal Superior de Justicia porteño inauguró hoy un...
Con chicanas a la Justicia nacional y vocación por concretar de manera definitiva el traspaso de la justicia a la Ciudad de Buenos Aires, el Tribunal Superior de Justicia porteño inauguró hoy un nuevo edificio judicial frente al Obelisco.
Con la presencia del jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, y parte de su gabinete, además de consejeros de la magistratura de la Ciudad y de la Nación, se inauguró la flamante sede en Carlos Pellegrini 313, un edificio construido en los 60 por el prestigioso Mario Roberto Álvarez y puesto ahora en valor.
En este nuevo edificio funcionarán todas las oficinas afectadas a las nuevas causas que tramitará la justicia porteña a partir del fallo Levinas, ya que el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de la Ciudad se transformó en máxima apelación de todos los casos civiles, comerciales y laborales de la justicia nacional.
Inés Weinberg, presidenta del TSJ, se refirió a los problemas que genera la resistencia de las cámaras de apelaciones. “A la justicia nacional le cuesta aceptar nuestra competencia. El desafío es aunar esfuerzos para no perjudicar al ciudadano”, dijo rodeada de Macri y de sus colegas Alicia Ruiz, Luis Lozano, Marcela De Langhe y Santiago Otamendi.
Entre el público estaba el ministro de justicia porteño, Gabino Tapia, el consejero de la magistratura nacional César Antonio Grau, representante de los abogados, y el consejero porteño Manuel Izura.
“Desde el fallo de la Corte Suprema de Justicia que sentó doctrina en el caso Ferrari contra Levinas, el Tribunal Superior de Justicia es la última instancia revisora de los recursos presentados ante las cámaras nacionales en la Ciudad”, dijo la jueza. El fallo del máximo tribunal consolidó la autonomía prevista en la reforma constitucional de 1994.
Jorge Macri, por su parte, destacó el apoyo del gobeirno porteño para poner en valor el edificio y afirmó su vocación de seguir trabajando por la transferencia plena de competencia a la justicia porteña. Remarcó que el traspaso de la justicia refuerza la autonomía porteña.
AvancesEl jefe de gobierno puso como ejemplo los avances realizados en materia de justicia laboral, en la que ante la falta de un traspaso judicial, la Ciudad de Buenos Aires creó su propio fuero, con códigos laborales propios mientras se sustancian los concursos. Dijo que esto es necesario si se considera que el 25 por ciento de todo el PBI de la Argentina es producido por la Ciudad.
Entre enero y hasta mitad de agosto de este año, ingresaron al Tribunal Superior de Justicia porteño 3917 causas, de las cuales 2884 se derivan de la doctrina Levinas. De ese total, 2551 son laborales, 259 civiles y comerciales, y 64 penales. Las diez restantes son de la secretaría de Asuntos Originarios del Tribunal.