Estudiantes de Río Cuarto es de primera tras el esfuerzo de 41 partidos y con un presidente que estuvo preso hasta agosto
La primera división para Estudiantes de Río Cuarto ya no es solo un recuerdo de la década del 80, en los extintos Torneos Nacionales. Cuatro décadas después, el salto a la categoría superior ...
La primera división para Estudiantes de Río Cuarto ya no es solo un recuerdo de la década del 80, en los extintos Torneos Nacionales. Cuatro décadas después, el salto a la categoría superior es una ilusión hecha realidad tras imponerse a Deportivo Madryn en la serie final del Reducido. Tras el 2-0 en Córdoba, el León del Imperio empató 1-1 en la revancha y en 2026 será el cuarto representante de Córdoba en primera. Se suma a los equipos de la capital de la provincia: Belgrano, Talleres e Instituto.
La segunda final, disputada en el estadio Abel Sastre, a pocos kilómetros de la costa marítima, fue suspendida a los 48 minutos de la segunda etapa por el árbitro Facundo Tello, cuando restaban tres minutos de los seis adicionados, a causa de la rotura del alambrado de una de las cabeceras y los proyectiles que arrojaron varios hinchas locales. Los jugadores visitantes se metieron inmediatamente en el vestuario, sin poder festejar ni dar la vuelta olímpica.
En una definición que estuvo precedida por las sospechas sobre los favores arbitrales que a lo largo de la temporada recibió Madryn, la labor de Tello fue impecable. Nunca perdió el control de un partido jugado con pierna fuerte, acertó en sus decisiones, como en la expulsión del volante local Federico Recalde, que recibió dos amarillas por fuertes faltas. Con buen criterio suspendió el partido cuando el ascenso de Estudiantes era irreversible y los hinchas locales pusieron en riesgo la seguridad. Tello no dejó margen para las suspicacias o la polémica. Reivindicó el nivel arbitral que viene siendo seriamente cuestionado por la manipulación de la AFA.
Estudiantes de Río Cuarto es el club en el que empezó a jugar Pablo Aimar antes de que Daniel Passarella convenciera al padre para que lo llevara a la pensión de River. Ya retirado, el ahora ayudante de campo de Lionel Scaloni en la selección argentina volvió en 2018 a disputar un partido de la Copa Argentina con Estudiantes, por donde también pasó su hermano Andrés.
Llegar al último día de la Primera Nacional implica una larga travesía. Con su mastodóntico formato de 36 equipos, atrás quedaron 634 partidos durante 297 días de competencia. Un largo peregrinar para Estudiantes, que se subió a un ómnibus para llegar de Río Cuarto a Madryn. El equipo de Iván Delfino reunió méritos suficientes: fue segundo en la Zona B, a tres puntos del líder Gimnasia (Mendoza), que consiguió el otro ascenso. Luego, en los playoffs del Reducido eliminó sucesivamente a Patronato, Gimnasia y Tiro (Salta), Estudiantes (Caseros) y Deportivo Madryn.
Le encomendó el armado del equipo a un viejo conocedor del fútbol del ascenso. Fue la quinta final para Delfino (54 años), que en 2015 ascendió con Patronato, pero después se quedó tres veces en el umbral con Sarmiento (Junín). Con otro técnico, Estudiantes también se había quedado con la miel en los labios del ascenso tras perder en el 2021 la final frente a Sarmiento y luego la definición del Reducido contra Platense.
Dentro de un equipo en el que lo colectivo estuvo por encima de lo individual, Lucas González fue el máximo goleador, con 8 tantos en 39 cotejos. La solidez defensiva fue uno de los pilares. Estudiantes recibió 25 goles en 41 fechas, y de los siete partidos que perdió, solo uno fue por una diferencia de dos tantos (Chaco For Ever en Resistencia).
Delfino ya conocía a Estudiantes por haberlo dirigido durante un semestre en 2023. Ahora volvía tras un breve y adverso paso por Colón. Minutos después de conseguir el ascenso, hizo una síntesis del largo año: “Hubo muchas dificultades desde el comienzo. Sin refuerzos, con el presidente preso, un montón de adversidades. El equipo se fortaleció desde lo mental, es un gran grupo. Desde principios de año, nunca le tuvimos miedo a la palabra ascenso, muchos no la quieren nombrar. Nosotros la tuvimos presente desde el primer día. Trabajamos para eso y acá estamos".
La referencia de Delfino al presidente preso fue para Alicio Dagatti, que siguió tres cuartas partes de la campaña desde la prisión. Estuvo privado de su libertad desde diciembre de 2024 hasta agosto 2025, imputado por ingresar drogas en camiones frigoríficos a la cárcel de Bouwer. Empresario dueño de frigoríficos y medios de comunicación, Dagatti fue liberado tras pagar una caución de 500.000 dólares. Aun continúa imputado en la causa por narcotráfico y corrupción en el Servicio Penitenciario provincial. Además del ingreso de dos kilos de cocaína, en el camión frigorífico se incautaron psicofármacos, whisky, siete celulares y accesorios. Por la misma causa estuvo detenido su hijo Ignacio.
En la última semana, mientras el fiscal de Delitos Complejos, Enrique Gavier, requirió la elevación a juicio de Dagatti por presunta asociación ilícita, la defensa del empresario -presente este domingo en Madryn- logró que la Cámara de Casación Penal declare la competencia federal del expediente.
#PrimeraNacional | Final
🚨Partido de vuelta
📌Deportivo Madryn (0) 🆚 #EstudiantesRC (2)
🏟️ Abel Sastre
🕔 17.00
⚠️ El presidente de #EstudiantesRC Alicio Dagatti arriba al estadio
👤Árbitro: Facundo Tello
🖥️VAR: Nicolás Lamolina
📹 @jmsponton pic.twitter.com/S7turW2u42
La lluvia de la mañana que cayó hasta el mediodía dejó una cancha pesada, con algunos charcos de los que saltaba agua cuando los jugadores iban al suelo con fragor. Lucha y fricción abundaron en el primer tiempo. Madryn intentó acortar camino con un juego directo, entendido esto como una seguidilla de pelotazos frontales, muy bien defendidos por los zagueros centrales Maffini y Ojeda. Nazareno Solis, un delantero que tuvo un paso fugaz por Boca y ahora se reconvirtió en volante ofensivo, era el lanzador del equipo chubutense para los tanques de arriba, Silba y Rivero.
Estudiantes se plantó firme, no permitió dejarse llevar por delante por un Madryn apurado, obligado por la derrota de la ida y la presión de sus hinchas. Ordenado para cubrir los espacios en su campo, el conjunto cordobés tuvo más ideas para atacar y buscar al paraguayo Javier Ferreira, protagonista de la primera situación de gol con un cabezazo que exigió una gran atajada de Bonnín.
¡EMPATÓ EL LEÓN DEL IMPERIO!
A los 85', Morales puso el 1-1 ante #Madryn y el 3-1 en la final del reducido. pic.twitter.com/nW36J0oalu
La ansiedad local contrastaba con la serenidad de Estudiantes, más prolijo y cuidadoso con la pelota. Ferreira volvió a estar cerca del gol con un remate desde fuera del área que salió junto a un poste. Madryn tuvo una oportunidad a través de la vía por la que más insistió: un cabezazo de Crego que salió muy cerca de un poste tras un centro de Nazareno.
El despliegue y la exigencia física le pasaron factura al delantero Lucas González, autor de un gol en la ida; lesionado, fue reemplazado por Agustín Fontana, ex-Banfield y River, que en el segundo tiempo definió pésimamente dos situaciones de gol. Terminó mejor Estudiantes en el primer tiempo, otra vez cerca del gol con una llegada que tapó Bonnín y un rechazo sobre la línea de Giacopuzzi.
Leandro Gracián acertó con los ingresos de Galeano y Montagna en la segunda etapa. Le dieron a Madryn más recursos ofensivos, otra profundidad. Estudiantes retrocedió, se inclinó decididamente por el contraataque. El desarrollo tenía otra intensidad y la final aumentó la emotividad con el golazo de tijera de Silba, tras una asistencia de Galeano.
Los incidentes con los hinchas de Deportivo Madryn que llevaron a Tello a terminar la final antes de tiempo. Estudiantes (RC) se impuso ante el Aurinegro en el global y ascendió a la primera división del fútbol argentino. pic.twitter.com/nxdl1k7lv2
— TyC Sports (@TyCSports) November 30, 2025El lanzamiento de humo amarillo desde las tribunas detuvo el partido por unos minutos. Los hinchas locales frenaron el envión de su equipo, que quedó muy condicionado con la expulsión de Recalde. Llegó el empate de Morales a cinco minutos, momento en el que los desbordes de los hinchas locales aceleraron el desenlace. La tierra en la que nacieron Pablo Aimar, Guillermo Pereyra, Diego Colotto, Franco Costanzo, Guido Herrera y Héctor Bracamonte, todos futbolistas con un amplio recorrido en la categoría superior, ahora también es de primera por Estudiantes.