Aceleran en Brasil el trámite para un proyecto de ley de amnistía que podría incluir a Bolsonaro
BRASILIA.- La Cámara de Diputados de Brasil eligió el jueves al diputado Paulinho da Força, del partido Solidariedade, como relator de una moción de urgencia aprobada el miércoles para tramita...
BRASILIA.- La Cámara de Diputados de Brasil eligió el jueves al diputado Paulinho da Força, del partido Solidariedade, como relator de una moción de urgencia aprobada el miércoles para tramitar un proyecto de amnistía que podría incluir al expresidente Jair Bolsonaro, condenado la semana pasada a 27 años de cárcel por intento de golpe de Estado.
El miércoles, la Cámara Baja de Brasil votó a favor de acelerar un proyecto de ley de amnistía, respaldado por la oposición de derecha, por un margen de 311-163. Todavía sin definirse cómo sería, la ley de amnistía se saltará así los debates en comisión y pasará directamente a la votación en el plenario.
Una versión preliminar del proyecto de ley de amnistía que se está debatiendo indultaría a los implicados en “manifestaciones políticas” a partir del 30 de octubre de 2022, pero los legisladores pueden modificar la propuesta antes de la votación final.
El diputado y sindicalista Da Força dijo que lo más probable es que el proyecto proponga la reducción de las penas a los involucrados en los eventos del 8 enero de 2023 en Brasilia, cuando manifestantes pro Bolsonaro asaltaron el Congreso, el Palacio del Planalto y la Corte. Además, el legislador aseguró que buscará “consenso” con las diferentes bancadas de la Cámara baja y el Senado, así como con el Supremo Tribunal Federal (STF), que condenó al expresidente.
“La idea es la pacificación. Construir un proyecto que no sea ni demasiado de derecha ni demasiado de izquierda. Hablar con todos, especialmente con el centro, e intentar votarlo lo antes posible”, dijo el diputado en una entrevista con el medio brasileño GloboNews.
Condenado por la Corte Suprema por liderar una organización armada para tratar de impedir la asunción del actual presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, en 2023, Bolsonaro busca ayuda del parlamento de mayoría conservadora para resolver sus problemas judiciales.
El expresidente, de 70 años, cumple con prisión domiciliaria preventiva en Brasilia y el miercoles fue diagnosticado cáncer de piel en etapa temprana.
Algunos legisladores han sugerido que el proyecto de ley podría reducir sus condenas en lugar de borrar sus antecedentes penales. Desde el ala conservadora están presionando para que se incluya una amnistía para el propio Bolsonaro, lo que podría mantenerlo fuera de la cárcel, pero seguiría impidiéndole presentarse a las elecciones presidenciales del año que viene.
Un largo camino"Necesitamos pasar esta página de nuestra historia y aprobar la amnistía, porque Bolsonaro merece recuperar todo aquello que Alexandre de Moraes le quitó“, había dicho el martes el senador Flavio Bolsonaro, hijo del exmandatario, al aludir al juez a cargo del caso.
El diputado Eduardo Bolsonaro, otro hijo del expresidente, dijo a Reuters el día en que su padre fue condenado que la amnistía legislativa sería un atajo para “lograr alguna forma de justicia (...) y traer la paz a Brasil”.
La moción de urgencia para tratar el proyecto de amnistía fue garantizada por una alianza entre el Centrão y la oposición, pero también aportaron su apoyo partidos de centro que forman parte del gobierno de Lula. La bancada oficialista de izquierda no registró ningún voto a favor.
El presidente de la Cámara de Diputados, Hugo Motta, anticipó que rechazará cualquier proyecto que “traiga aún más polarización para el país”.
“Tenemos diferentes puntos de vista e intereses divergentes en la Cámara en relación con los acontecimientos del 8 de enero de 2023. Corresponde al pleno soberano decidir”, dijo Motta al abrir la votación de procedimiento el miércoles por la noche.
Da Força dijo que buscará el apoyo del gobernador de São Paulo, Tarcísio de Freitas, y que el objetivo es hacer posible que la votación se lleve a cabo la próxima semana. El diputado añadió que también hablará con el presidente del Senado, Davi Alcolumbre, para que la propuesta no encuentre resistencias en la cámara alta.
“Será un texto consensuado entre la Cámara y el Senado”, dijo el relator Da Força. “Voy a intentar convencer al Supremo de que es necesario pacificar el país”, agregó.
El texto, sin embargo, aún enfrenta un largo camino para convertirse en ley.
Primero debe superar la resistencia del oficialismo en el plenario de la Cámara de Diputados. De lograrlo, pasaría a discusión en el Senado, donde el gobierno de Lula es más fuerte, aunque también minoritario.
Además, el propio Lula podría vetar la ley una vez aprobada por el legislativo y varios magistrados del STF aseguraron que la norma sería inconstitucional.
Una eventual amnistía “lejos de abrir el camino para cualquier pacificación, sería un desafío al poder judicial y a la conciencia democrática del país“, escribió en X la ministra de relaciones institucionales de Brasil, Gleisi Hoffmann.
El relatorLos partidos de centro y centroderecha de la cámara baja, también conocidos como Centrão en Brasil, fueron los que articularon la designación de Da Força como relator del proyecto, una figura con llegada a varias de las diferentes fuerzas políticas que conviven en el Congreso brasileño.
Aliado histórico del movimiento sindical y de integrantes del actual gobierno del Partido de los Trabajadores (PT), Da Força se distanció del Ejecutivo después de recibir poco espacio en el gobierno de Lula. Por otro lado, el parlamentario mantiene buenas relaciones tanto con partidos del centro como con la oposición.
El proyecto original de amnistía fue presentado en 2023 por el senador opositor Marcelo Crivella, pero los parlamentarios dijeron que aquel solo funcionará como una “carcasa” para el nuevo proyecto.
“Yo redacté el texto pensando en quienes estuvieron aquí en el Congreso . Ahora es natural que se incluya a los condenados en la trama golpista y que se trate de la reducción de penas”, dijo Crivella al diario O Globo, justo después de la votación del miércoles.
La intención de tratar solamente la reducción de penas, evitando un perdón irrestricto a todos los involucrados, divide a las bancadas del Congreso. Por un lado, los bolsonaristas presionan para incluir a militares y a líderes políticos acusados de planear los actos, mientras que, por el otro, una parte del Centrão quiere la amnistía se extienda solo a quienes vandalizaron la Plaza de los Tres Poderes en Brasilia.
Se espera que el debate vuelva al plenario en un plazo de al menos dos semanas.
¿Acuerdo secreto?Por otro lado, el juez Moraes desmintió una versión de prensa según la cual habría un acuerdo secreto entre el STF y parte del parlamento para redactar una ley que reduzca las penas únicamente a los condenados por el 8 de enero, a cambio de permitir que Bolsonaro cumpla el resto de su condena en prisión domiciliar.
“El STF (Supremo Tribunal Federal) no hace acuerdos. El STF aplica la ley”, afirmó el magistrado en un comunicado.
Bolsonaro dice ser perseguido por la justicia brasileña y cuenta con el respaldo del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que impuso aranceles del 50% a muchos productos brasileños por lo que considera una “caza de brujas” contra el exmandatario.
Washington también ha sancionado a varios magistrados del STF, incluido Moraes. En paralelo con la acción parlamentaria, Bolsonaro tiene previsto apelar su condena, según anunció su defensa.
Además de esta sentencia, el expresidente se encuentra inhabilitado políticamente hasta 2030 por desinformar sobre el sistema electoral. Brasil celebrará en 2026 elecciones presidenciales sin que la derecha haya definido hasta ahora un candidato sustituto para Bolsonaro.
Por su parte, el actual presidente Lula, de 79 años, ha expresado en varias ocasiones su intención de presentarse a la reelección.
Agencias AFP, Reuters y diario O Globo